Los principios son duros

Aquí estamos un día más.

No quería escribir la siguiente entrada tan pronto, pero ayer me entró el primer bajón desde que me fui de España y la verdad es que se pasa de puta pena. No quería decírselo a nadie al principio y estaba guardándolo todo dentro, sin hablar ni nada. Llevaba todo el día encerrada, solo había salido por la mañana un rato y cuando llegó la tarde mi fuerza se derrumbo, no quería seguir aquí... quería coger un avión y volver a España. Volver a casa y acostarme en mi cama y estar con mi madre. Era lo único que quería.
Antes de tomar la decisión de volver a España, hablé con mis padres y mi mejor amigo, pero tenía las ideas tan claras que necesitaba hablar con alguien más para que me diera también su opinión. Al final acabé hablando con Axel, contándole lo que me pasaba y el porque estaba así. Él, con su español a lo indio, intentó ayudarme y darme una visión mucho más clara que la que me daba mi familia por whatsapp. Después de hablar con él, largo y tendido, decidí quedarme aquí y seguir intentándolo. Realmente me dijo lo mismo que me había dicho todo el mundo, que es el principio y que los principios son duros, que voy a estar así la primera, la segunda e incluso la tercera semana, pero que es lo más normal.
Y parece mentira, pero no es lo mismo que te lo diga una persona por una pantalla a que te lo diga una persona que la tienes al lado. Si estuviera en España me lo habría dicho Pablo y habría hecho lo mismo, pero cuando te lo dicen por una pantalla no es lo mismo. Es algo tan extraño que no sé como explicarlo.

La cosa es que estar fuera de tu zona de confort no es algo fácil y cuenta mucho llevarlo de buena manera, se necesita gente a tu lado, gente que te apoye y que cuando vean que estas cayendo te ayuden a levantarte. Yo pensaba que era fuerte, que podría con esto y que no me entraría un bajón así, pues tengo que decir que hasta los más fuertes sufren y se recuperan.

Como ya he dicho antes, no es fácil salir de tu casa e irte a miles de kilómetros porque el futuro en tu país es, más o menos, inexistente. No es fácil dejarlo todo para empezar una nueva vida junto a gente que conoces de dos meses... pero no es imposible, de verdad, no lo es.

Esta semana ha estado siendo difícil para mi porque no he hecho nada, no empiezo a trabajar/estudiar hasta la semana que viene y estoy en casa metida, saliendo un rato por la mañana y ya. Y aunque me encanta la soledad, hay veces que se necesita compañía.

Y como he dicho muchas otras veces, si tenéis la oportunidad de viajar o ir a estudiar a otro país hacedlo, no descartéis esa oportunidad por dejar a la familia o a los amigos, no tiréis vuestros sueños a la basura por no salir de vuestra zona de confort. Perseguir aquello que más anheláis hasta agotar todas las oportunidades y no dejéis de abrir puertas jamás. Podéis perder el tren, pero recordad, pasan cada media hora. Subid al siguiente.

Pasad un día genial y nos vemos en el siguiente post.

Gracias,
Lulú.